El símbolo y la superstición del mal de ojo es una de las imágenes simbólicas más fuertes del mundo. Sin embargo, a pesar de las diferencias entre las culturas, conserva en gran medida el mismo significado sin importar dónde se cuenta la historia. ¿Podemos curar el mal de ojo y protegernos frente a ello? ¿Cómo podemos saber si estamos siendo afectados? y en caso de ser así, ¿cómo quitar el mal de ojo para siempre? Cuando tratamos de curar esta maldición, es por que alguien ha violado el campo energético de otra persona, por lo tanto, la víctima tendrá que neutralizar sus efectos y reforzar su energía ya que no podrá lidiar contra el mal de ojo mientras siga siendo susceptible.
¿Eres una persona desafortunada? ¿Torturada en una enfermedad? ¿Sin fuerza y sin ganas de vivir? El mal de ojo es una mirada centrada en infligir daño, sufrimiento o alguna forma de mala suerte en aquellos sobre los que se lanza. Tan solo con mirar se establece claramente que uno tiene la intención de que algo malo le suceda al objetivo del enfoque, ya sea por celos o pura malicia y al igual que otras muchas supersticiones, la creencia en el mal de ojo es una de las manifestaciones más comunes incluso a día de hoy.
Índice
Miles de millones de personas en el mundo creen que cualquiera puede ser maldecido por el mal de ojo. De hecho, es más fácil vivir así ya que pueden cerrar los ojos a las verdaderas causas de sus problemas, pero sus desagradables consecuencias no desaparecerán por ningún lado y continuarán envenenando su vida. Si crees en las supersticiones, es posible que estés de alguna forma obsesionado con la idea de que te han hecho mal de ojo, sobretodo tras algunas coincidencias desafortunadas un tanto extrañas. De ser así, aquí podrás encontrar la clave para descubrir como curar el mal de ojo y neutralizar sus efectos en tu vida para siempre.
Origen del mal de ojo
Para conocer su origen, tenemos que tener en cuenta que la protección psicológica sobre las influencias negativas se ha utilizado desde la antigüedad, hace más de miles de años. Los papiros egipcios contienen información sobre cómo protegerse del “mal de ojo” y de las personas malvadas. Las tabletas de arcilla de Mesopotamia también están llenas de textos cuneiformes sobre como deshacerse de la maldición y protegerse de la influencia del mal. Cualquier civilización que elija, contendrá información sobre como proteger al individuo de la energía negativa, las personas destructivas y sus influencias.

Su origen no esta claro del todo, aunque sabemos con certeza que no es cristiano ni musulmán. Sin embargo, el sistema de creencias que defiende ha sido asimilado parcialmente por los adherentes a ambas religiones. Por lo tanto, se cree que el verdadero origen del mal de ojo se remonta a la antigua Grecia y Roma, cuando pensaban que el mal de ojo era la mayor amenaza para cualquiera que hubiera sido elogiado en exceso, o recibido admiración más allá de lo que realmente merecían. La persona elogiada se volvería tan hinchada de orgullo que provocaría su propio destino a través del mal de ojo, que se creía que podía causar enfermedades físicas y mentales.
Se pensaba que los dioses y las diosas castigaban a aquellos que se habían vuelto demasiado orgullosos de sus logros, y los destruían con el poder del mal de ojo para restaurarlos al nivel de simples mortales. La superstición sostiene que el mal de ojo es lo suficientemente poderoso como para provocar un desastre real en la persona receptor de la maldición. De hecho, se pensó que todas las enfermedades que no tuvieran una causa obvia, eran síntomas de brujería causados por el mal de ojo.
Sobre el mal de ojo
Esta creencia popular está muy extendida en todos los continentes, sobretodo en Medio Oriente, Asia, Europa y América Central que es donde más le temen al mal de ojo. El hinduismo predica que el ojo es el punto más poderoso desde que el cuerpo humano puede emitir energía. Además, creen que los celos, el odio, las intenciones criminales, el desprecio, la hostilidad y la mentira están asociadas con la envidia, siendo esta la raíz del poder que se convierte en un mal de ojo.
Curiosamente, los hindúes enseñan que los tiempos de cambio en la vida, como durante la pubertad, el matrimonio o el parto, uno es más vulnerable a la amenaza del mal de ojo. Y Aunque los hombres son capaces de arrojar el mal de ojo, las mujeres son las fuentes más comunes de esta energía. Por esta razón, en el sur de la India, las mujeres se pintan los párpados de negro para protegerse del mal de ojo. En Europa, el mal de ojo se originó con la idea de que la envidia tenía el poder de causar mala suerte y se creía que la fuente más grande de este poder eran obviamente, las brujas. Sin embargo, el miedo al mal de ojo no se transmitió a Estados Unidos, excepto en forma de metáfora.
Síntomas del mal de ojo
Para una persona que cree en Cristo, el mal de ojo simplemente no existe. Si un creyente comienza a atender pensamientos de que ha sido engañado, debe orar, confesar y recibir la comunión. Aún así, ¿Cómo determinar si realmente padecemos un mal de ojo? Por extraño que parezca, cada persona en su vida se convierte múltiples veces en un objetivo para el mal de ojo. No una, ni dos, sino cientos y miles de veces. Pero, ¿Por que a ciertas personas parece que nunca les afecta? La respuesta esta en su energía.
Puede parecer extraña esta situación, pero una persona con la energía espiritual desarrollada sera inmune al mal de ojo, la envidia y a todo tipo de magia que sea de naturaleza sentimental. Ningún otro individuo podrá violar su campo energético para afectar negativamente a su vida por ningún medio. Y en esto, la psicología juega un papel muy importante. Una persona con la energía espiritual susceptible será siempre vulnerable a todo tipo de maldiciones y engaños por parte de personas con la autoestima más alta o por alguien con la energía más desarrollada.
¿No estás seguro si sufres un mal de ojo? ¡Pues vamos a eliminar ese mal de ojo! Pero claro, a cambio de una cierta cantidad de dinero. O trata de quitártelo por tu cuenta. Pero aún así no funcionará, y vendrás a mí de todos modos, pero ya será también más caro. Muchos charlatanes se aprovechan de personas que creen padecer un mal de ojo sin ser esta la causa de sus problemas. ¿Cuales son los síntomas más comunes en un mal de ojo?
Síntomas comunes en un mal de ojo
- Picazones al realizar ciertas acciones especificas.
- Desafortunado/a económicamente o en el amor.
- Bostezar constantemente sin tener sueño
- Manchas y forúnculos en el cuerpo
- Eructar constantemente sin comer
- Problemas de salud
- Insomnio
Debemos tener en cuenta que cada uno de nosotros habrá experimentado todo lo dicho anteriormente en ciertos períodos de nuestra vida, y no por eso, estamos todos malditos. Muchas veces es a consecuencia del exceso de trabajo banal y la depresión o las enfermedades somáticas. Por esta razón, debemos tener mucho cuidado ya que dicha lista, es la herramienta ideal para que cualquier charlatán pueda adaptar cualquier situación a su escenario predeterminado y obtener la capacidad de sugestionarnos y engañarnos.
Puedes hacer una limpia con huevo para tratar de interpretar su significado y comprobar si padeces mal de ojo. Sin embargo, es más efectivo emplear todo ese tiempo en desarrollar tu propia energía espiritual. De esta forma, además de neutralizar su efecto y quitar el mal de ojo de una vez por todas, serás inmune a cualquier magia de naturaleza sentimental como los amarres de amor por poner otro ejemplo.
Cómo protegerse del mal de ojo
Para curar el mal de ojo, además del uso de amuletos protectores y magia blanca, existían una gran variedad de rituales para este fin. Los griegos por ejemplo, llevaban incienso y una cruz como protección, y además, cada noche mantenían algunos objetos debajo de sus almohadas o sobre sus cabezas para protegerse contra el mal de ojo. Era efectivo colocar cordones rojos, negros o blancos, un clavo, pólvora, pan, sal, ajo, un anillo azul índigo o un par de hebillas plateadas.
Hay que destacar que cada uno de estos objetos tiene un significado a la hora de crear una defensa efectiva contra el mal de ojo. Por ejemplo, la pólvora simbolizaba la habilidad para luchar y enfrentarse contra el mal de ojo, el clavo simboliza la fuerza, el índigo mantiene tu poder y la sal era un símbolo de preservación y fortaleza. Si de verdad quieres que no te afecte en absoluto esta maldición, trata de utilizar varios métodos de protección en vez de usar solo uno.
En otros lugares del mundo como en el Medio Oriente utilizaban la sal y escupían para expulsar la energía negativa de su interior o quemaban alumbre para purificar el entorno y quitar el mal de ojo. También en Etiopía, era normal inhalar humo y beber agua bendita para obtener una limpieza espiritual completa. En Japón, se colocaban pilares de sal frente a la casa para evitar que el mal entre en ella. Por toda China, es muy normal colocar figuras frente a la entrada para proteger el hogar de entidades malignas y también suelen atar campanas en las piernas de los niños que acaban de comenzar a caminar para ahuyentar con su sonido a las entidades no deseadas. En Indonesia, se cuelga una terrible máscara en la entrada con los ojos saltones y con los dientes sonrientes para asustar el mal y alejarlo de nuestro entorno.
Por otro lado, en Italia, el mal de ojo es muy común y para protegerse usan un collar especial hecho de cuerno de cordero que su función es la de alejar todo lo negativo. En Bangladesh, se dibuja un punto negro en la frente de los niños para evitar la maldición del mal de ojo y las mujeres muy jóvenes tienen un punto secreto dibujado en kohl detrás de las orejas. Sin embargo, lo más normal para protegerse del mal de ojo siempre ha sido dibujar o adjuntar una imagen de un ojo a cualquier propiedad valiosa, como un edificio, un barco e incluso ganado. Incluso a día de hoy, esta tradición se sigue dando con la finalidad de garantizar seguridad, alta productividad, etc.
Como quitar el mal de ojo
Para neutralizar sus efectos tendremos a nuestra disposición innumerables métodos de protección contra el mal de ojo. Pero si la prevención no tuvo éxito, existen otros remedios para deshacerse del mal de ojo cuando ya estamos siendo afectados por el. Entre ellos podemos destacar los siguientes.
Curar el mal de ojo
- Los griegos, en algunas aldeas, queman el pelaje de un oso para curar la maldición.
- Hay gitanos que se masajean la frente para deshacerse de los efectos nocivos del mal de ojo.
- En muchos otros países, incluyendo Grecia, Armenia y Asiria, se cree que un pellizco en la retaguardia remediará la maldición del mal de ojo.
- Algunos cristianos tienen la tradición de crear la señal de la cruz con sus manos. Al mismo tiempo, apuntan el índice y el dedo meñique hacia la fuente del mal de ojo.
- En la India, las mujeres también se pintan un punto en la frente justo entre los ojos con la misma finalidad.
Además de todas estas tradiciones, podemos emplear un baño de rosas para quitar el mal de ojo y la carga de energía negativa que nos llega a través de la envidia o la magia de naturaleza sentimental. Es un ritual muy sencillo, efectivo y que necesita de pocos ingredientes.
Baño de rosas para quitar el mal de ojo
Este baño purificador es muy sencillo, solo tienes que hacerlo a la caída de la tarde o por la noche antes de dormir. Para hacerlo necesitaras.
- Rosas blancas
- Sal gorda
- Una vela
- Incienso
- Una olla
- Agua
Luego, debes seguir paso a paso estas instrucciones.
- Pondremos dos litros de agua en una olla y la pondremos a hervir junto con los pétalos de las rosas blancas.
- Prepararemos un baño con agua tibia y le agregaremos tres cucharadas de sal.
- Encenderemos la vela blanca y el incienso para purificarnos.
- Echaremos el agua de rosas por toda nuestra piel sin mojarnos la cabeza.
- Nos sumergiremos en el baño durante al menos 9 minutos.
Tras completar el ritual, deberás notar cada día como la carga negativa se desvanece poco a poco permitiendo que fluya nuevamente la energía por nuestro interior.
Amuletos contra el mal de ojo
El método más popular para escapar de los efectos del mal de ojo en muchas culturas es mediante el uso de talismanes, símbolos y joyas. Hay docenas de amuletos, oraciones y rituales que personas de todo el mundo creen que pueden usar tanto para protegerse de la maldición como para deshacerse de ella. Uno de los ejemplos más poderosos y populares en Medio Oriente y África es un talismán llamado khamsa (en árabe) o hamsa (en hebreo) que se asemeja a una mano intrincadamente tallada.
Khamsa, Hamsa, Mano de Fátima
También conocido como la “Mano de Fátima” o “Mano divina“. El hamsa es un símbolo en forma de mano con el mal de ojo en la palma que se puede utilizar en papel tapiz o joyas para protegerse y eliminar el mal de ojo.

El Hamsa también se encuentra en la cultura judía, donde se la conoce como la “Mano de Dios” o la “Mano de Miriam“. La popularidad de la Cabalá ha revivido el hamsa e influido en su presencia en la joyería y el diseño. Y aunque devotos monoteístas religiosos condenan los amuletos como supersticiosos y por lo tanto pecaminosos, los talismanes siguen siendo extremadamente comunes en los hogares de todas las religiones. Y en muchas partes del mundo, la oración o la invocación del nombre de Dios se considera una de las formas más fuertes para protegerse del mal de ojo.
Ojo turco, Nazar o Piedra del mal de ojo
Tiene varios nombres, pero por ejemplo en Turquía generalmente se le conoce como Nazar (el diseño más básico y popular que prevalece en el Medio Oriente). Es un talismán de cristal diseñado con círculos azules y blancos en el centro hechos para simbolizar el mal de ojo y alejar a los espíritus malignos. Este símbolo se puede encontrar en hogares y personas de todas las religiones del mundo. Desde Asia occidental hasta América Central, aunque este amuleto se originó en Grecia, donde se lo conocía como un amuleto “apotropaico“, lo que significa que está destinado a “reflejar” el daño y el poder del mal de ojo.

El símbolo es tan universal en Turquía que es casi imposible de evitar. Incluso sin tener ningún interés en tenerlos cerca, constantemente puedes encontrarlos por casa ya que se imprimen en recibos, se colocan como pegatinas en las bolsas, en las cajas de las compras, se tejen en la ropa, son convertidos en perillas de puertas, usados como joyas, envueltos en muebles o simplemente colocados alrededor de la persona protegida. Por lo tanto, salen de la madera como si de termitas se tratase.
El mal de ojo ¿solo un mito?
Probablemente, el mal de ojo no exista como un fenómeno objetivo, sino que existe como un fenómeno subjetivo. Hay una historia muy interesante sobre cómo un grupo de personas llegó a África para realizar investigaciones. Después de llegar donde una tribu africana profesaba el culto vudú, los investigadores descubrieron un patrón interesante. Todos los africanos que creían en el poder del hechicero, en los rituales y en las maldiciones que podía enviar, poseían una fe tan fuerte, que el que creía que se le imponía una maldición generalmente moría en unos pocos días.
Sin embargo, los investigadores, aunque maldecidos, continuaron su investigación, y nada malo les sucedió a ninguno de ellos. Cuando los africanos preguntaron por qué sucedía esto, los científicos respondieron lo siguiente. “Las personas que son propensas al pensamiento mágico y que no están seguras de sí mismas, generalmente resultan ser la verdadera raíz del mal de ojo“. ¿Cómo podemos quitar el mal de ojo? Todos buscan la respuesta a esta pregunta, pero en cambio, el efecto placebo es una prueba real de que la mayoría de las veces somos nosotros mismos quien nos causa esos problemas.
Desde un punto de vista religioso
Usar un amuleto como el ojo turco es en realidad una idea fundamentalmente incompatible con el Islam, pero la creencia se practica y las personas generalmente desconocen el conflicto de intereses que se plantean entre sí. Además de esto, la creencia en el mal de ojo es universalmente incompatible con las doctrinas centrales del cristianismo (Deuteronomio 18:10-12) ya que si otorgamos parte de nuestra confianza para ganar seguridad en algo que no sea Cristo, ese algo se convertirá en otro ídolo, restando el valor de nuestro enfoque hacia el Señor, el único ser capaz de protegernos de todos los espíritus malignos.
Desde un punto de vista psicológico
Si una persona pudiera matar o herir con la mirada, no habría tantos de nosotros. La mayoría de nuestros problemas, como regla general, solo tienen una razón, nosotros mismos y nuestros pecados. La mejor cura para el mal de ojo es el escepticismo saludable, y esto está indicado no solo por sacerdotes, sino también por muchos psicólogos especializados.
En la mayoría de los casos, todo es mucho más simple. Si tu vida no va bien, intenta responder una serie de preguntas simples. ¿Como alimentos saludables y estoy durmiendo lo suficiente? ¿Presto atención al tratamiento de mis enfermedades crónicas? Si no, ¿cómo puedo reconstruir mi horario y ajustar mis hábitos para no arruinar mi salud? ¿Siempre actúo de buena fe? ¿No me “autoengaño” todos los días? ¿La razón objetiva que me rodea tiene una mala actitud hacia mí y, de ser así, cómo puedo cambiar esto? ¿Tengo un propósito y un significado en la vida? Si hablas honestamente contigo mismo/a sobre esto, muchas cosas encajarán y el “mal de ojo” ya no sera dueño de tu destino.
Olvida la auto mediación y si por cualquier razón, no puedes resolverlo por tu cuenta, hazte un examen médico y busca ayuda profesional de un psicólogo especializado.
¿Conoces otros métodos para sacar el mal de ojo y quieres que lo publiquemos? Si conoces otras formas efectivas de eliminarlo o tienes más información sobre cómo quitar el mal de ojo para siempre !Compártelo en los comentarios¡ Trataremos de responder lo antes posible.